Objetivos en la poda de los árboles frutales
El objetivo de este tipo de poda es conseguir que lleguen a la edad adulta lo más rápidamente posible, a la vez que retrasar su envejecimiento. Es primordial que al árbol le llegue suficiente luz y aire para que se desarrolle correctamente. Además de dirigir y equilibrar el árbol, con una buena poda mejoramos su fertilidad, dando más y mejores frutos.
Consejos para realizar una poda correcta
Tened en cuenta los siguientes consejos para realizar una poda correcta en los árboles frutales en función del tipo de fruto:
- Frutas con hueso: se deben podar cuando las ramas tienen más de 5 hojas. Cortaremos la extremidad de los brotes cercanos a las frutas para que éstos aprovechen toda su savia. Este tipo de árboles crece muy rápido, por lo que los tendremos que podar durante varias semanas.
- Frutas con pepita: éstas crecen y maduran en los árboles con un mínimo de 2 años de vida. Para que la fruta sea grande y buena sólo dejaremos que le crezcan 3 yemas o 2 yemas y un pistilo para que disponga de más savia.
Si queremos que el árbol todavía nos dé más frutas, ataremos sus ramas con una cuerda para dejarlas en la posición más horizontal posible. De esta manera las flores crecerán mejor bajo las hojas y en las bases de las ramas.
Es importante también enderezar las ramas. En muchas ocasiones, después de tormentas o vendavales hay ramas que se han roto o torcido, presentando diferentes vacíos en el follaje. En estos casos ataremos las ramas laterales hacia arriba para que se desarrollen correctamente.
Los árboles frutales requieren distintos tipos de poda
- Poda de Formación: Se realiza durante los 3 o 4 primeros años que van desde que se planta hasta que entra en producción. Es casi imprescindible hacerla y su objetivo es conseguir una forma adecuada para el árbol. Una vez el árbol ya está formado se practican anualmente las dos podas siguientes.
- Poda de Limpieza: Consiste en quitar elementos indeseables como ramas secas, chupones, ramas que enmarañen la copa, tocones secos, etc. Esta poda es necesaria en todas las especies y durante todos los años de la vida del árbol, sea frutal o árbol ornamental.
- Poda de Rejuvenecimiento y Regeneración: Se hace en ciertos casos. Cuando el frutal llega a un momento en el que la producción empieza a decrecer, en lugar de optar por arrancar el árbol, se poda drásticamente para que rebrote. A veces merece la pena y otras veces, no. Por ejemplo, en el melocotonero no interesa una poda de regeneración ya que entra rápidamente en producción y dura de 15 a 17 años dando fruto, así que es mejor plantar uno nuevo. En el caso del cerezo o el ciruelo tampoco, ya que si se le cortan ramas gordas muere. En el olivo sí que resulta más aplicable la poda drástica de regeneración, así como en el peral y el manzano.